¿ A quién no le gustan las fresas?
Hoy os traigo un DIY muy fácil, económico y práctico. Lo único que necesitamos es una caja de fresas, gesso, pintura acrílica, gel medium (o cola de décopatch) y un par de hojitas de décopatch.
Lo primero que hacemos es lijar las imperfecciones de la caja, a continuación pintamos el exterior con gesso para cubrir los poros y, de paso, también las letras de la caja (es posible que necesite un par de manitas). Acto seguido, pintaremos con la pintura acrílica la base y el interior de nuestra cajita.
Una vez secas todas las capas de pintura y gesso, procederermos a trocear con la mano nuestras hojas de décopatch y a ir pegándolas en nuestra cajita. En mi caso he decidido hacerlas de un sólo diseño pero podéis escoger varios papeles y combinarlos entre sí.
Finalmente, he colocado los nombres de correspondientes con un abecedario de Tim Holtz, troquelado con la sizzix. En el caso de la cajita verde, el abecedario es de cartulina y, para darle más juego, lo he "barnizado" con glossy accents. En la caja de cebra, el abecedario lo he hecho con goma eva de purpurina.
¡Ahora ya no hay excusa para tener las cosas ordenadas!
Espero que os haya gustado el resultado... ¡feliz verano!
